miércoles, 8 de junio de 2016

Teresa de Jesús y Emily Dickinson, Irene Escolar y Silvia Abascal en "La habitación luminosa"


Una arriesgada originalidad: "Alma y Cuerpo",  una obra que en realidad son dos, separadas e independientes. La que hemos visto se llama "La habitación luminosa" y la otra es "La hora oscura"

"Danza, Poesía y Teatro, sobre textos de Teresa de Jesús y Emily Dickinson". No tenía ni idea de lo que nos íbamos a encontrar. 

En el programa apuntan que han querido "poder hablar de lo que más les impactó de estos genios creadores: el refugio interior de La habitación luminosa como único espacio posible de la mujer a la hora de crear"...

Esquina izquierda del escenario antes de empezar la obra
Al entrar en el teatro el escenario estaba oculto totalmente, por un "telón" de metal negro, con una puerta cerrada en el centro. Había una frase escrita en el metal: 
"Si tengo la sensación física de que me levantan la tapa de los sesos, sé que eso es poesía"
         Emily Dickinson 

Se abre la puerta de metal y sale Irene Escolar con un corpiño color marfil y una falda como de organza que le trasparenta las piernas, es Teresa de Jesús muy jovencita, y habla desde muy cerca a los espectadores, con convicción. Se va. Y sale Silvia Abascal. Es Emily Dickinson con un vestido blanco encantador pero mucho más austero. Parece una mujer más frágil. 
Después de conmovernos las dos con su presencia tan natural y cercana (estamos en primera fila) cierran la pequeña puerta, sube la pared de metal y ya tenemos todo el escenario a la vista.
La escena siguiente es sorprendente, desde una de las esquinas del escenario dos mujeres entran arrastrándose por el suelo en una danza perturbadora, una de ellas es Teresa de Jesús. A la vez, Emily Dickinson se sienta dócil en una silla al fondo del escenario.

A partir de entonces se van sucediendo escenas en las que las dos actrices nos dicen sus poemas, no sé si es "decir", es como sacarlos del alma públicamente, de una manera que te invade y no te deja pensar en otra cosa. 

Además de ellas aparecen otros tres personajes, Muerte, Alma y Ángel, dos mujeres que bailan flamenco y danza contemporánea y un hombre que canta, entremezclándose con las protagonistas y consiguiendo una historia con sentido.

Irene Escolar está soberbia diciendo como Teresa de Jesús... "Vuestra soy, para Vos nací, ¿qué mandáis hacer de mí?...¿qué mandáis hacer de mí?..." una actriz casi en trance, totalmente entregada a cada una de las palabras que dice. Verla actuar desde tan cerca emociona. 
Creo que esta actriz tiene algo diferente, excepcional. La hemos visto esta temporada también en "El público", en un papel extraño y difícil y por el que estuvo nominada a los Premios Max de las Artes Escénicas como mejor actriz de reparto. 


Para mí ha sido una experiencia intensa, de las que sales trastocada.

La obra consigue una presencia viva de dos mujeres muy distintas, que vivieron mundos muy separados, la España del siglo XVI y el Massachussetts del XIX... pero parece que comparten haber vivido en una pequeña sociedad cerrada, muy religiosa y estricta, sobretodo para las mujeres.
Y aunque tanto Teresa como Emily tuvieron acceso a una formación a la que la mayoría de las mujeres ni se acercaban, su parte creativa debía quedar reservada a lo íntimo, "al refugio interior"...


En el enlace con la web del Teatro Español que os pongo a continuación podéis escuchar un audio de la obra. Es imprescindible que lo oigáis. 
(Lo encontraréis al final de la página, junto a las fotos)

Breve audio de "La habitación luminosa"


Portada del programa de la obra

Interior del programa de la obra
Me siento especialmente agradecida a los que han ideado este proyecto, esta apuesta tan arriesgada: José Manuel Mora (Dramaturgia) y Carlota Ferrer (Dirección)








sábado, 4 de junio de 2016

"Ópera para secadores", de la Compañía francesa Blizzard Concept, en el Teatro Circo Price

Sólo un comentario breve para contaros un espectáculo curiosísimo que hemos visto, sobretodo por si tenéis la oportunidad de verlo.
Te hace reír, te asombra. Quizás es demasiado corto, dura una hora.

Dicen que "...mezcla el teatro, los malabares y la nueva magia...", es todo de una sencillez pasmosa, pero luego te deja atónito. Y de repente, sin casi elementos, crean unas imágenes bellísimas en el escenario.
Parte interior Teatro Circo Price

En la pista del Teatro Circo Price dos "malabaristas-clowns" franceses y muy pocos elementos. Al principio sólo unas bolas blancas como de poliespan que flotan y se mueven solas, como que se quieren caer, claro, pero algo las sujeta en el aire... un momento después aparece el protagonista del espectáculo, ¡el secador!, y todo continúa con más secadores, más bolas, algunos globos...

Los actores hablan muy poco, pero les entiendes perfectamente.

Aparte de pasar un rato muy agradable te da ese gusto añadido de ver que hay gente dedicando mucho esfuerzo a hacer cosas originales y aparentemente simples. 
A mí eso me fascina.

En el siguiente enlace podéis ver la imagen con la que anuncian la obra, (no he conseguido encontrar ningún vídeo que os dé una idea...)
Al ver la imagen casi no se entiende pero la realidad es que el actor lleva un montón de secadores pegados al cuerpo que hacen que las bolas blancas se mantengan en el aire... para llegar hasta ahí nos hicieron reír...



miércoles, 1 de junio de 2016

Aitana Sánchez-Gijón y "La Rosa Tatuada" de Tennessee Williams

Programa de la obra

Este domingo hemos visto algo dulce.
Sin querer me ha salido este adjetivo, no me lo esperaba. 
Si pienso un poco más me sale "envolvente". 

Al entrar en la sala te encuentras con el escenario de la fotografía que veis más abajo, una casa. 

En cuanto empieza la obra la casa y los alrededores se llenan de vida, de actividad. 
Al fondo una pantalla gigante con una imagen en movimiento que nos sugiere el atardecer en una calle o una carretera del sur de Estados Unidos. Varios personajes van hacia algún sitio, sonidos y músicas de barrio pequeño, parece que hace mucho calor...
Se acaba la jornada y Serafine Delle Rose, (pronunciando la "s" como sedosa, como en italiano), una costurera siciliana que hace mucho tiempo salió de su añorada Italia, espera a su marido en la puerta de casa, como cada día arreglada para la ocasión, porque su marido, Rosario, es la razón de su existencia.
Su marido conduce un camión de plátanos, o al menos eso parece. 

La dueña de la casa, Aitana Sanchez-Gijón, te cautiva desde que aparece en escena con un vestido perfecto, de una tela deslizante tipo raso, con algunas rosas grandes sobre un fondo rosa pálido, un vestido barato seguramente, pero parece hecho sólo para ella. Lleva unos zapatos de tacón alto y fino con una soltura maravillosa. Está imponente. 
Y desde ese mismo momento hasta el final de la obra te mantiene atrapado. Un gusto.

La actriz es una mujer guapa y con una elegancia natural que se le nota en todo, pero este personaje le resalta y engrandece. Serafine es una mujer sin recursos, sin posibilidades, y durante gran parte de la obra, una mujer hundida, pero a pesar de todo, preciosa, elegante y turbadora. 

Es evidente que pienso que sin Aitana la obra no sería la misma, es la pieza clave. Pero es verdad también que todo a su alrededor está en consonancia, los actores, la escenografía, (me impactó cómo ese escenario que veis se transforma y nos muestra varias habitaciones de la casa), la versión de la obra hecha por Carme Portaceli, con un montón de frases intercaladas en italiano, que los actores manejan de maravilla, el montaje de vídeo para determinadas escenas que colabora y se integra con todo a la perfección...
No sé qué puedo decir más, me gustó mucho. Una obra completa.

Escenario antes de empezar la obra



Me impresiona pensar en lo difícil que debe ser conseguir que una obra de teatro quede como un todo perfecto, supongo que muchas veces ese pequeño añadido que la hace "completa" es cuestión de suerte y coincidencia, no sé, quizás... como dicen los expertos ese pequeño añadido varía en cada representación y todavía más... ¡en cada espectador!... ¡qué empresa tan arriesgada esto de hacer teatro! (y no estoy haciendo un chiste) 
Realmente me sorprende cuánta gente se dedica a esto y cuántas apuestas diferentes podemos encontrar, porque desde luego un mundo fácil no debe ser...

Si os apetece ver algunas imágenes de la obra: